“We Live in Time”: Los flashbacks que ovacionan el presente
El pasado 28 de noviembre se estrenó en Chile, “We Live in Time”, la viralizada película del director irlandés, John Crowley, protagonizada por Florence Pugh y Andrew Garfield, que tuvieron una química en este film, descrita por ambos, como “única” en sus carreras actorales.
La película, más que una trágica historia de amor, como todos esperaban que fuera, es una mirada al presente. Al ritmo de emotivas canciones como por ejemplo, “Everything I Am Is Yours” de Villagers, el director relata la historia de amor de Almut (Pugh) y Tobias (Garfield), quiénes se conocen de una forma inusual, tal como comienzan las grandes historias de amor, de las cuales nos enamoramos en la pantalla grande.
En el transcurso de la historia, las risas no decaen, por lo mismo, lo trágico se hace un poco más ameno, más llevadero, no dejando que la tristeza domine el relato.
El manejo de la historia es esperanzadora en un presente de disfrute, gozo y alegría, así como el llanto es un alivio del presente.
A pesar de que, al ser un film “taquilla”, y que en redes sociales se masifiquen la mayoría de sus diálogos, no es lo mismo que verla en la gran pantalla.
Sin duda, las magistrales actuaciones de Garfield y Pugh, el amplio abanico de emociones que vive el público y la complicidad de sus actores, es algo que se debe vivir sí o sí dentro de una sala de cine.